Un Policía Nacional fuera de servicio salvó el día de Navidad la vida de un bebé al que pudo reanimar, tras sufrir un accidente de tráfico el vehículo en el que viajaba con sus padres y un hermano de 9 años, quienes resultaron heridos.
El bebé está ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) pediátrica del hospital Virgen del Camino y fue visitado por el agente, Antonio Ferreira, quien recibió el agradecimiento de la familia, según señaló en una entrevista a Diario de Navarra.
El accidente se produjo a las 17.30 horas del día 25 de diciembre en la carretera NA-150 (Pamplona- Aoiz- Lumbier), al salirse de la calzada el vehículo que conducía la madre del pequeño y chocar contra la pared de una casa abandonada en el municipio de Lizoáin (Navarra).
El agente, un orensano de 47 años destinado actualmente en la capital navarra, pasó por el lugar en una furgoneta, en la que viajaba con su novia, y acudió a ayudar en las tareas de socorro a la familia junto a otras personas.
El policía pudo practicar una reanimación cardio-pulmonar al pequeño, que estaba inconsciente, y consiguió su recuperación.
"El bebé no respiraba, le reanimamos y al poco tiempo recuperó el color", ha revelado el agente, quien ha asegurado que está muy contento de que el niño esté bien y que su actuación "tiene mucho de casualidad. Cualquiera hubiera hecho lo mismo"
El bebé está ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) pediátrica del hospital Virgen del Camino y fue visitado por el agente, Antonio Ferreira, quien recibió el agradecimiento de la familia, según señaló en una entrevista a Diario de Navarra.
El accidente se produjo a las 17.30 horas del día 25 de diciembre en la carretera NA-150 (Pamplona- Aoiz- Lumbier), al salirse de la calzada el vehículo que conducía la madre del pequeño y chocar contra la pared de una casa abandonada en el municipio de Lizoáin (Navarra).
El agente, un orensano de 47 años destinado actualmente en la capital navarra, pasó por el lugar en una furgoneta, en la que viajaba con su novia, y acudió a ayudar en las tareas de socorro a la familia junto a otras personas.
El policía pudo practicar una reanimación cardio-pulmonar al pequeño, que estaba inconsciente, y consiguió su recuperación.
"El bebé no respiraba, le reanimamos y al poco tiempo recuperó el color", ha revelado el agente, quien ha asegurado que está muy contento de que el niño esté bien y que su actuación "tiene mucho de casualidad. Cualquiera hubiera hecho lo mismo"











